Archivo mensual: enero 2012

Con cierto disimulo

Al loríbidi que el equipito de los ‘madridolímpicos’ siguen adelante: «Madrid 2020 ya tiene logo y web». A la chita callando estos tíos siguen tirando pa’lante. No les interesa ya que se les dé tanta cobertura mediática como antaño, pero continúan erre que erre con una idea que ha dejado de tener calado en la ciudadanía.

Mientras Madrid se llena de parados, de desahuciados, de trabajadores en el umbral de la pobreza; mientras se congelan o se bajan los sueldos de los currantes, se les suben los impuestos, el transporte, el combustible, el gas, la luz, el agua y el teléfono; mientras el país está sin gobierno, unos porque ya no están (a dios gracias) y se pelean entre ellos, otros porque son nuevos (qué miedo dan) pero no tienen ni puta idea de lo que hay que hacer; mientras todo eso ocurre este grupito de iluminados esperan obtener los réditos que la esperpéntica idea otrora aplaudida por la plebe ha de procurarles, siguen adelante sin empacho ni rubor, con desparpajo aunque sin tanta chulería: los Lissavetzky, Blanco, Gallardón, Coghen, a los que se suman los Cardenal, Botella, Castrejana, el pequeño Samaranch… En fin, toda la caterva de ilustraditos que han perdido por el camino (mejor para ellos) a los Urdangarín pero continúan contando con el aliento de la Casa Irreal.

Quizá no interese en mitad de la caída libre en la que nos sume la crisis económica, financiera, política e ideológica darle publicidad al desmán que supone gastarse una porrada de millones en volver a optar a un nombramiento que sólo servirá para generar un gasto mayor sin fin. La clase política ya nos ha demostrado que son capaces de hundir el país. Por el camino nos irán dando música para nuestros oídos, como que no hace falta invertir porque en Madrid ya está todo construido (aunque para 2020 estará todo tan obsoleto que habrá que renovarlo), o que para 2020 la crisis ya estará superada (aunque las multimillonarias inversiones habrá que hacerlas aún con el cuello dentro del agua). En la crisis hemos caído de golpe, pero saldremos de ella a golpes y tras muchos años (¿ocho?), y estos avispados quieren engañifar al pueblo con una bufonada grotesca. O nos movilizamos o nos hunden más mientras ellos nadan en sus pingües negocios.

Una pena tanta comedia

Me he puesto a ver el Málaga-Sevilla con mi hijo el pequeño que (no es del todo culpa mía) me ha salido futbolero. Está siendo un partidazo (ya es raro que me haya quedado a ver toda la primera parte), con mucho ritmo y buen juego. Pero es una lástima que un grupito de jugadores (por ambos equipos) se estén dedicando más a fingir faltas o/y a exagerar los pequeños golpes que se llevan que a correr y a jugar. Esa no es una actitud profesional.

No parecen hombres sino muñequitas (al más puro estilo Andrés Iniesta, que chilla y se tira cada vez que alguien se le acerca). A lo mejor estos jugadores buscan un fútbol-baloncesto donde no se pueda tocar al que lleva la pelota, pero me temo que llegado el caso dejará de ser un deporte que engancha por lo que tiene de viril su puesta en escena. Repito para los que acaben de llegar: no me gusta el fútbol profesional.

Actualización a las 23:20 h. Acaba el partido y el bajón de juego ha sido considerable. Estos tipos gastan demasiada energía en gesticular, tirarse (o dejarse caer tras forzar el contacto), fingir y protestar. Se ve que la tarjeta amarilla es demasiado botín y ponen más empeño en conseguir que se la saquen a un rival que en proseguir el juego. La emoción se ha mantenido por lo incierto del resultado, pero me he aburrido en esta segunda parte. Sí, sí, ya sé… el rollo ese de las 180 pulsaciones… Una disculpa que ha calado en el aficionado. Me pregunto qué hacen en rugby, boxeo, fútbol americano o kickboxing para que no se les vaya la pinza.

Leyes a la carta

«El Gobierno español anuncia una reforma de la Ley Audiovisual que hará inviable el canon radiofónico». Y digo yo, pobre currito ignorante de mí, ¿no estaría mejor dedicado ese Gobierno español creando riqueza y no subiendo impuestos a tontas y a locas y llevando a los curritos compatriotas al umbral de la pobreza con recortes salariales salvajes? Pero veamos en qué charco se van a meter estos gualdrapas del actual (des)Gobierno español.

La liga futbolera es una liga privada, al menos mientras la federación en la que se integra la LFP siga siendo una entidad privada, como recoge el artículo 1.1 del decreto que regula el entramado federativo del país.

Nos están diciendo que si un grupo de amigos organizamos una liga de fútbol chapas o de Blood Bowl, un suponer, y de repente esta liga cobra un desmedido interés público (más allá de los cuatro frikis que lo jugamos), tendríamos que permitir que las radios, amparándose en una mal entendida «libertad de información», vengan a dar cobertura a nuestra liga (liga privada –aunque cobremos entradas– que no liga pública). Y esto ocurre en un Estado que se dice reconocedor y garante de la propiedad privada, desde la material hasta la intelectual (ahí están todavía esos aberrantes proyectos de ley que califican de pirata a todo usuario de un bien público como es Internet o a todo propietario de una impresora).

Claro que mientras que ese mismo Estado siga arrogándose el derecho de «Calificar las competiciones oficiales de carácter profesional y ámbito estatal» (artículo 8.e de la ley del deporte), delegando «funciones públicas de carácter administrativo» en las entidades privadas llamadas federaciones españolas (artículo 30.2 de la ley del deporte), a lo mejor sí que tienen derecho sus señorías a legislar lo que les salga de las meninges.

¿Y si la federación española de fútbol y la liga profesional que se integra en ella decidieran no asumir aquella delegación dejando que sea el propio Estado quien organice sus campeonatos nacionales? Ahora que ya sabemos que los políticos son capaces de hundir un país, qué no harían con una liga de fútbol…

El tonto del bote

La sociedad ha adquirido un ritmo vertiginoso tanto para lo bueno (avances tecnológicos –no tanto científicos–, un suponer) como para lo malo. En la parte negativa incluya el lector cuanto se le ocurra, que quien suscribe apuntará la actual vorágine por hacerse famoso de cualquier forma.

Ahí están esos estúpidos programas que los más menguados defienden como experimentos sociales sólo porque reúnen a una docenita de personas (eso sí, de escaso bagaje cultural o/y pesonal). Así las cosas llega la noticia de que un socio del Barça –apuesto a que más por ansias de notoriedad que por deseos de justicia– ha presentado una denuncia contra el reincidente central del R.Madrid conocido como Pepe. Viene esta denuncia a cuento de que al intocable –y últimamente demasiado teatrero– Messi, el susodicho le pisó una mano.
«Un socio del Barça presenta una denuncia por lesiones contra Pepe».

Debe ser «perruquero» el soci puesto que riza el rizo del absurdo: no denuncia ‘el lesionado’, no denuncia el club que se vería damnificado, y va y denuncia un mindundi que se entromete en vidas ajenas. ¿Es que el Messi es tan idiota que ha de ser defendido por terceras personas a las que no conoce de nada? ¿Es que el todopoderoso Barça es incapaz de movilizar su cuerpo de abogados?

Veremos qué ocurre, o más bien cómo se quitan los jueces esta boutade de encima. En principio lesiones no parece que hubiera habido, entendiendo lesiones en el más amplio sentido de la palabra. Ni todos los pisotones producen lesiones, ni la bota del energúmeno Pepe estaba toda ella llena de tacos.

Principio y final

El mundo del fútbol es muy raro. Todo lo que en él sucede es extraño. He aquí un botón de muestra.

El 15 de junio del pasado año 2011 el prestigioso portal deportivo-jurídico Iusport se hacía eco de una posible inmoralidad: «El escándalo del sorteo de la fase de ascenso a Segunda B en vídeo». Sí, sí: documentado con un vídeo.

Sigan las instrucciones del portal Iusport y sitúen la acción del vídeo unos segundos antes del minuto 3:55. Oirán que al (no hay motivo para dudarlo) presidente del Alcobendas Sport le dicen dónde está la bola de la Arandina. El hombre agarra una bola, y sin soltarla da vueltas a las otras dos que había en la pecera… y por arte de birlibirloque saca la bola de la Arandina.

Y el tipo (que alguien explique por qué) celebra como un éxito que haya salido la bola por la que había preguntado. Luego le dicen que aún queda averiguar el nombre del rival, y sin ruborizarse un ápice agarra directamente una bola concreta de otra pecera y resulta que es la de su club, el Alcobendas Sport. ¿Por qué celebrar el deseado emparejamiento antes de que sucediera?

Sigan leyendo la información que ofrece Iusport… Es todo muy sospechoso, ¿verdad? Bueno, pues esto es el principio.

El final es que la Arandina milita este año en el grupo II de la 2ª división B y el Alcobendas Sport se ha quedado en 3ª división, encuadrado en el grupo VII.

¿Por qué tiene que ser todo tan raro en el mundejo del fútbol? (Y luego se quejan cuando se les cuestiona su seriedad).